Una de las gasolineras atracadas la tarde del 31 de diciembre, ubicada en Albolote./R. Q.Una de las gasolineras atracadas la tarde del 31 de diciembre, ubicada en Albolote. / R. Q.

En uno de los asaltos hirieron al empleado de uno de los surtidores tras golpearlo con la culata del arma de fuego

Tan solo quince minutos, entre las 16.10 y las 16.25 horas. Ese fue el tiempo empleado por dos encapuchados en atracar las gasolineras BP de Albolote y BP del Parque Comercial Granaita, también lo intentaron en una Repsol de Maracena pero no pudieron gracias a la maña del empleado, que se encontraba en ese momento en el interior de la tienda de esta estación de servicio. Todo ocurrió la tarde del 31 de diciembre.

La primera gasolinera atracada fue la BP de Albolote, ubicada en el Polígono de Juncaril, frente a las vías del metro. Dos individuos llegaron en una moto de la marca Piaggio a las 16.10 horas armados con un subfusil o una recortada y con los rostros tapados con pasamontañas y casco. Uno de ellos entró a la tienda de la estación de servicio con el arma de fuego, mientras el otro esperó en una puerta de cristales evitando que esta se cerrara. «Abre la caja» fueron las únicas palabras del atracador dirigidas al empleado y con permiso del único cliente que se encontraba en ese momento en el interior del establecimiento, mientras su mujer esperaba en el coche junto al surtidor de gasolina.

El empleado abrió la caja y entregó los 300 euros que había en su interior. Desde la puerta, el otro atracador arengaba a su colega: «Vamos ya», le espetó, según comunicaron ayer desde la propia gasolinera, una estación de servicio atracada en tres ocasiones en 2019. Ni al cliente ni al empleado les ocurrió nada.

Los dos atracadores se montaron en el ciclomotor y pusieron rumbo a Maracena, concretamente, al surtidor de Repsol, situado justo a la entrada del municipio por la zona de las vías del metro. El empleado de esta gasolinera vio llegar a los dos atracadores encapuchados y tuvo la habilidad de bajar la persiana de la puerta de entrada de la tienda cuando apreció que uno de ellos portaba un arma de fuego. Los dos delincuentes no pudieron entrar al establecimiento. Los atracadores volvieron a montarse en la moto y pusieron rumbo a la gasolinera BP del Parque Comercial Granaita.

Los dos atracadores se mostraron más agresivos en este tercer robo con violencia. El único empleado de este surtidor, quien fue amenazado con el arma de fuego, fue agredido con la culata del subfusil detrás de la oreja lo cual le originó una brecha de la que fue atendido por un dispositivo sanitario. El botín fue exiguo y no superó los quinientos euros. Los dos delincuentes se montaron en la moto, que parece ser robada también, y pusieron rumbo a la zona de Almanjáyar.

Guardia Civil mantiene abierta una investigación y, al menos, uno de los dos atracadores podría estar perfectamente identificado y su arresto podría ser cuestión de poco tiempo.