El director adjunto operativo (DAO) de la Guardia Civil envió el sábado una noticia sobre el caso Koldo a un grupo de whatsapp que comparte con José Luis Ábalos, presunto cabecilla de la trama de los contratos de la pandemia

 

El director adjunto operativo (DAO) de la Guardia Civil, Manuel Llamas, máximo mando uniformado del cuerpo y cargo de confianza de Fernando Grande-Marlaska, envió el pasado sábado un mensaje al general de la Guardia Civil responsable de la Unidad Central Operativa (UCO), Alfonso López Malo, para interesarse por el contenido de dos memorias USB que contendrían “material privado y personalísimo” de José Luis Ábalos.

Los discos duros, que fueron intervenidos por la UCO en el registro de la casa del asesor Koldo García Izaguirre, contendrían supuestamente conversaciones del exministro de Transportes con otros altos cargos del PSOE, entre ellos, el propio Pedro Sánchez. Moncloa teme que el hallazgo de esos mensajes refuerce los indicios sobre la implicación del presidente del Gobierno en el rescate de Air Europa o en la visita a España de Delcy Rodríguez, entre otros episodios bajo investigación.

Como adelantó El Confidencial el pasado viernes, Ábalos también ha enviado un escrito al Juzgado Central de Instrucción número 2 para suplicarle al magistrado que dirige las pesquisas, Ismael Moreno, que le devuelvan las dos memorias USB alegando que albergan “archivos laborales y personales”, “fotografías” de sus hijos y otros datos de carácter íntimo. Con todo, la derivada política del contenido de los pendrives es la que ha provocado más nerviosismo.

A las 10.26 horas del sábado, el teniente general Llamas escribió un mensaje en la red social WhatsApp enlazando otra noticia publicada ese mismo día, por el diario The Objective, sobre las memorias que reclama Ábalos. “Buenos días, Alfonso. Échale una ojeada a esto y luego hablamos”, escribió el DAO del Instituto Armado en la red social.

Lista de alumnos del curso del Ceseden de la promoción de 2022.
Lista de alumnos del curso del Ceseden de la promoción de 2022.

Fuentes próximas a Llamas aseguran que el “Alfonso” al que se dirigía era el general Alfonso López Malo, jefe de Policía Judicial, la división del Instituto Armado en la que se encuadra la UCO, encargada de las actuaciones del caso Koldo y del análisis de todos los dispositivos electrónicos relacionados con estas diligencias.

Sin embargo, Llamas cometió un desliz al compartir la noticia. En lugar de enviársela al responsable de la UCO, la subió a un grupo de WhatsApp en el que participa casi medio centenar de personas. Se trata de un foro de antiguos alumnos del Curso de las Fuerzas Armadas del Centro Superior de Estudios de la Defensa Nacional (Ceseden) de la promoción del año 2022. Llamas completó la formación junto a otros mandos del Ejército, políticos de diferentes partidos y periodistas.

Se da la circunstancia de que, durante varios meses, Llamas compartió las aulas del Ceseden con Ábalos, que en ese momento ya había sido cesado como ministro de Transportes y era diputado raso del PSOE en el Congreso. El nombre del político valenciano figura en la lista de inscritos en la promoción de 2022. El DAO de la Guardia Civil y el político valenciano siguen compartiendo en la actualidad el grupo de WhatsApp de antiguos alumnos, a pesar del estallido de la operación Delorme y el papel clave que juega la UCO en el esclarecimiento de este caso de corrupción.

El teniente general de la Guardia Civil, que depende directamente de Mercedes González, exconcejala socialista en el Ayuntamiento de Madrid y directora general del cuerpo desde hace un mes por decisión de Moncloa, se dio cuenta de su error y borró ese y otros mensajes. Con todo, El Confidencial ha tenido acceso a una captura de la comunicación.

Llamas fue nombrado DAO el 12 de diciembre de 2023. Previamente, ocupó el puesto de jefe de gabinete de la exdirectora de la Guardia Civil María Gámez, que dimitió en marzo de 2023 después de que su marido se viera envuelto en el escándalo de los ERE. El sumario que instruye la Audiencia Nacional reveló después que el asesor de Ábalos mantenía una relación fluida con Gámez y que esta incluso acudió en varias ocasiones al Ministerio de Transportes para hacerse test PCR de covid suministrados por la trama en una época en la que era prácticamente imposible acceder a este tipo de pruebas.

Las averiguaciones del caso Koldo han desvelado, precisamente, que el asesor de Ábalos supo que estaba siendo investigado meses antes de que la UCO lo detuviera y entrara en su casa por los contratos de la pandemia.

Fuente