- «Vamos a tener semanas difíciles, duras, pero las vamos a superar»
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha concedido este martes una rueda de prensa en la que ha dado algunas pinceladas del «plan económico de choque» para hacer frente al coronavirus. Ha afirmado que el plan, que llevan «varias semanas» diseñando, va en el mismo sentido que las medidas adoptadas por la Comisión Europea esta tarde.
El plan cuenta con cuatro ejes principales, según ha detallado el presidente. El primero consiste en «dedicar recursos a proteger y garantizar el bienestar de las familias españolas, en particular de las familias trabajadoras». Para ello facilitarán cuestiones como la reducción de jornadas laborales y darán facilidades a las familias cuyos hijos se vean afectados por el cierre de centros educativos que ya se han producido en varias ciudades españolas.
En segundo lugar, se garantizará «el suministro de medicamentos y acceso al material sanitario». En tercer lugar, se quiere «garantizar el empleo en los sectores más afectados», con reducción de jornadas y otras medidas.
En cuarto lugar, se busca «apoyar la liquidez de las pymes» mediante «líneas de crédito para facilitar la liquidez», así como «medidas para facilitar el cumplimiento de obligaciones tributarias mediante aplazamientos y moratorias». Dicho de otro modo, el Gobierno contempla posponer el abono de los impuestos, pero no una rebaja fiscal como han propuesto otros países.
Además, asegura que se tomarán «medidas específicas para los sectores del turismo y transporte», dos de los más afectados por el momento.
Para todo ello, el presidente ha anunciado que «el jueves está prevista una reunión con los agentes sociales para sumarles al consenso de la respuesta» contra el virus.
«Semanas difíciles»
En clave europea, Sánchez anunció desde Moncloa el deseo de que los socios europeos consensúen mayor flexibilidad del gasto público, y una política de ayudas a las pymes que sufran las consecuencias de esta crisis de salud pública.
Recordó el presidente que distintos organismos internacionales, como la OCDE, vienen realizando previsiones económicas que indican que las consecuencias negativas serán serias, pero transitorias. En este sentido reconoció que será complejo hacer una cuantificación del impacto económico, «porque no sabemos la duración».
«Haremos lo que haga falta, donde haga falta y cuando haga falta», ha señalado con respecto a combatir el coronavirus.
«Vamos a tener semanas difíciles, duras, pero las vamos a superar. Y lo conseguiremos antes si cada miembro de la sociedad asume su papel», señala. Por ello, ha incidido en que todos «debemos cooperar siguiendo las recomendaciones de los expertos», especialmente en lo concerniente a seguir «al pie de la letra» las medidas de higiene y velar especialmente por las personas más vulnerables.
