
Los diésel y gasolina son los motores más afectados por el veto
PATXI FERNÁNDEZ
Madrid
06/03/2023 a las 22:27h.
La UE alcanzó el pasado otoño un acuerdo para que a partir de 2035 todos los turismos y furgonetas nuevos que se comercialicen en el mercado comunitario sean «cero emisiones», lo que en la práctica supondría el veto a los vehículos de combustión.
Sin embargo, la adopción definitiva de la norma está aún pendiente del último paso formal, la luz verde de los ministros. La presidencia de turno de la UE, que este semestre ocupa Suecia, preveía incluir el asunto como punto para adopción sin discusión en un consejo de ministros ordinario de esta semana, pero la propia presidencia ha indicado que la decisión «queda pospuesta a una reunión posterior» , sin apuntar una nueva fecha para retomar la cuestión, y tras las reticencias mostradas por Alemania, Italia, Polonia y Bulgaria.
El ministro alemán de Transportes, el liberal Volker Wissing, pidió como condición que la Comisión Europea presente una propuesta que acompañara la nueva norma para que los vehículos que funcionen con combustibles sintéticos (‘e-fuels’) puedan seguir comercializándose más allá de 2035 en la UE.
Esta posición, no obstante, choca con la posición de los ‘verdes’ en el Gobierno de coalición alemán, como la ministra de Medio Ambiente, Steffi Lemke, que defiende respaldar el veto acordado a nivel europeo.
En España hay ahora mismo 18.000 puntos de recarga, suficientes según la asociación de usuarios de vehículos eléctricos para el parque móvil que existe, pero pensando en el futuro harán falta muchos más. Los coches eléctricos apenas representan el 4% en España, muy lejos de las cifras de otros países europeos.
Se espera que en 2030 circulen en nuestro país unos cinco millones de vehículos eléctricos, con las ventas de este tipo de coches pisando el acelerador.
Desde la Asociación Europea de Fabricantes de Vehículos, ACEA, indican que «la apertura tecnológica sigue siendo esencial para conservar la agilidad necesaria para responder a las distintas necesidades y adaptarse a las circunstancias cambiantes. Como demuestra la actual crisis energética, la diversificación es esencial para mejorar la resistencia de Europa». Esta entidad también ha recalcado que industria automovilística de la UE está «inequívoca y plenamente» comprometida a hacer frente al cambio climático «lo antes posible». Además hacen hincapié en que «se está haciendo todo lo posible para invertir masivamente en electrificación, construir la cadena de valor vertical, conservar puestos de trabajo y ayudar a la UE a seguir siendo competitiva».
«Con la inflación en alza y el precio de las baterías aumentando por primera vez en más de una década, la asequibilidad corre el riesgo de convertirse en un obstáculo mayor en la transición hacia las emisiones cero. Por ello, los responsables políticos deben ocuparse también de las emisiones del parque automovilístico existente«, agregan desde ACEA.
La postura de los ecologistas
Mientras, la Federación Europea de Transporte y Medio Ambiente (T&E) considera que los liberales alemanes «arriesgan la credibilidad de Alemania en el escenario mundial» al bloquear, o por lo menos retrasar sin fecha la votación en la Unión Europea para eliminar la venta de automóviles y furgonetas nuevos con motores de combustión a partir de 2035.
Así, la directora sénior de vehículos y movilidad de T&E, Julia Poliscanova, que ha añadido que el partido liberal alemán (FDP) «está convirtiendo la eliminación de motores en Europa en una batalla por el alma de la coalición de Alemania«.
Poliscanova ha considerado que la defensa del FDP al motor de combustión interna mediatne combustibles bio y sintéticos neutros en emisiones de CO2 «podría ser bueno para sus bases, pero daría ventaja a Estados Unidos y China, que amenazan con superar a Europa con inversiones masivas en automóviles eléctricos y baterías«.
T&E considera que los ‘e-combustibles’ son una solución mucho menos ecológica para los automóviles que los eléctricos de batería ya que este combustible no aliviará los problemas de contaminación del aire y por su elevado coste de producción.
La pasada semana, durante la entrega del Premio ABC al Mejor Coche del Año 2023, el comisionado del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica del Vehículo Eléctrico y Conectado (Perte VEC), José María López, firmó que «la Comisión Europea se va a replantear el plazo para poner fin a la venta de vehículos de combustión en la Unión Europea (UE)«, establecido para 2035.