El renacer de los coches diésel en Europa: han cedido y está todo aprobado
Se ha aprobado la Euro 7, y sorprendentemente, es una buena noticia para los vehículos de combustión. En contra de las expectativas, la implementación de la normativa se retrasará y sus restricciones serán menos rigurosas de lo inicialmente previsto.
La normativa, enfocada en la reducción adicional de emisiones contaminantes como el óxido de nitrógeno (NOx), partículas finas y compuestos orgánicos volátiles (COV), originalmente tenía previsto entrar en vigor a partir de 2025 para los vehículos ligeros (turismos y furgonetas) y a partir de 2027 para los vehículos pesados (camiones y autobuses). Sin embargo, la recién aprobada normativa, de manera provisional, aplaza su implementación alrededor de dos años, lo que significa que no será obligatorio cumplirla hasta 2027 y 2029, respectivamente.
Junto a ello, los fabricantes de turismos cuya producción anual sea inferior a 10.000 unidades, como es el caso de marcas de lujo como Ferrari o Rolls-Royce, disfrutarán de un año adicional de período de gracia. Además, solo estarán obligados a cumplir con los estándares establecidos por la normativa Euro 6, lo que implica alcanzar los 80 mg/km de NOx en vehículos con motor diésel y 60 en los de gasolina.
Las furgonetas, en términos de emisiones, también se regirán por el mismo estándar. En cuanto al resto de los turismos, se ha fijado un límite de 60 mg/km de NOx, sin importar el tipo de combustible utilizado.
Respiro diésel
Aunque los modelos de combustión tienen los días contados en Europa, la industria respira aliviada al menos por ahora, en lo que concierne a los coches diésel, especialmente los modelos más pequeños. Esto se debe a que, según la propuesta inicial de la Euro 7 que pretendía imponer una reducción del 50% en las emisiones máximas de NOx, habría sido necesario incorporar catalizadores que encarecerían significativamente su producción, hasta el punto de hacerla no rentable.
Asimismo, en líneas generales, la implementación original de la normativa Euro 7 habría implicado, según las estimaciones del sector, un aumento de entre 1.000 y 2.000 euros en el costo de los vehículos nuevos. Esta medida hubiera impactado negativamente en todos los automóviles, agravando aún más la situación para los modelos más pequeños.
Con la implementación de la Euro 7 en una versión más flexible, se ha conseguido eludir este obstáculo. A pesar de ello, es importante destacar que esta normativa sigue siendo más rigurosa que su predecesora e introduce cambios significativos.
Novedades Euro 7
Entre las novedades más destacadas, la primera consiste en que los vehículos nuevos deberán cumplir con los requisitos de emisiones por un período más prolongado en términos de tiempo y/o kilometraje. Mientras que la normativa Euro 6 establecía un periodo de 5 años o 100.000 kilómetros, la Euro 7 exigirá que los vehículos se mantengan dentro de los límites durante 10 años o 200.000 kilómetros.
La segunda innovación, de alcance global, radica en la medición de las partículas generadas por el desgaste de neumáticos y frenos. En virtud de esta medida, los vehículos de combustión, híbridos y de pila de combustible deberán limitar sus emisiones a 7 mg/km, mientras que los vehículos eléctricos solo podrán emitir 3 mg/km y las furgonetas térmicas hasta 11 mg/km.
Por otra parte, en los vehículos eléctricos se requerirá asegurar un rendimiento de al menos el 80% en los componentes de la batería durante los primeros 100.000 kilómetros o 5 años de antigüedad, y mantener un rendimiento mínimo del 70% a los 8 años o 160.000 kilómetros.
Estas regulaciones más estrictas se espera que reduzcan las emisiones de NOx en un 56% y las emisiones de partículas en un 39% para el año 2035.