Cuando estalló la guerra les costaba 18 euros menos llenar el depósito
17 jun 2022 . Actualizado a las 05:00 h.
No hay techo para los carburantes en España. Los precios de la gasolina (2,12 euros el litro) y el diésel (2 euros el litro) han vuelto a batir récord históricos en la última semana, según los últimos datos publicados en el Boletín Petrolero de la Unión Europea.
Llenar un depósito de 55 litros de gasolina en una estación de servicio del país cuesta de media 110,2 euros, aunque a ese recibo habría que restarle 11 euros del descuento de 20 céntimos el litro aprobado por el Gobierno, que expira en apenas 13 días. ¿Qué hay de la factura si repostamos gasolina? Se va a los 116,4 euros.
Así han subido los carburantes en España y Alemania
El mercado ya se ha comido la totalidad de la bonificación que entró en vigor el viernes 1 de abril, lo que ha obligado al Gobierno a anunciar que prorrogará la medida.
¿Por qué se han disparado tanto los precios? Las grandes petroleras insisten en la reducida oferta de crudo —el barril de brent cotizó ayer en los 119 dólares— y diésel, agravada por la guerra de Ucrania y la baja capacidad de los países productores para aumentar el bombeo, porque llevan siete años sin invertir en infraestructuras de extracción.
Las autoridades de competencia españolas dan por buenos esos argumentos que el Gobierno alemán refuta, a pesar de que los carburantes en sus estaciones, gasolina y diésel, han subido mucho menos (11,25 % y 22,73 %, respectivamente) que en las gasolineras españolas (33 % y 35,3 %) desde el inicio de la invasión.
Aunque hay informes de economistas apuntando que las grandes petroleras se han quedado al menos con cinco de los 20 céntimos del descuento español, Competencia lo niega. Por eso resulta difícil explicar el sorpasso de precios que se ha producido. Tradicionalmente, la gasolina en España ha sido más barata que en Alemania. Incluso en pleno apogeo bélico en Ucrania, a un conductor español le costaba 18 euros menos llenar su depósito de 55 litros que a un alemán. Las cosas han cambiado desde entonces, a raíz del anuncio de las bonificaciones. Repostar gasolina en España cuesta ahora seis euros más que en Alemania.
Precios pactados
Al Ejecutivo teutón no le cabe la menor duda: las grandes petroleras están inflando los precios del combustible de forma pactada. Al menos eso es lo que cree su ministro de Economía, Robert Habeck, quien ha acusado a los productores de carburantes de quedarse con una parte de los descuentos aprobados en ese país a finales de marzo para abaratar durante tres meses 30 céntimos el litro de gasolina y 14 céntimos el de diésel en la factura de los consumidores que paran a repostar.
Confiscaciones
Las sospechas han empujado a Habeck a proponer que se endurezca la ley antimonopolio, facilitando la recopilación de datos, y, de ser necesario, obligar a las compañías a dividirse para aumentar la competencia. Además, también sopesa darle más poder a la Oficina Federal de Cárteles para investigar.
Esta misma autoridad inició en el mes de abril una investigación ante las sospechas de colusión en el sector de los carburantes. Su propio presidente, Andreas Mundt, ha amenazado con imponer cuantiosas multas si concluyen que han manipulado los precios. De ser así, el Gobierno quiere legislar para permitir que el Estado confisque a las empresas infractoras las ganancias obtenidas de forma irregular.
Los carburantes en Galicia
Otra de las grandes incongruencias que arrojan los datos de los combustibles son los precios gallegos. En la comunidad, donde opera una refinería de Repsol, los carburantes son más caros que la media española. Llenar el depósito de 55 litros les cuesta a los conductores casi cuatro euros más, según datos del Ministerio de Transición Ecológica.
El Gobierno mantendrá el descuento de 20 céntimos para todos los conductores
Lo más llamativo es que los precios más caros se registran en la provincia de A Coruña, donde está ubicada la planta, echando por tierra el argumento del sector de que la dispersión poblacional es la que empuja al alza las tarifas
—tradicionalmente eran más altas en Lugo y Ourense—. La gasolina en la provincia coruñesa se sitúa en los 2,191 euros el litro. El diésel en los 2,073 euros. La gasolina más barata está en Lugo. Allí las estaciones de servicio la cobran a una media de 2,176 euros el litro. Por su parte, el diésel más asequible se puede repostar en Pontevedra (2,068 euros el litro).
Competencia atribuyó recientemente estas distorsiones al menor número de gasolineras independientes en la Comunidad. No obstante, las autoridades gallegas certifican el aumento del número de las low cost en toda la geografía. Y otra cifra cuestiona esa explicación: de las 38 gasolineras automáticas que hay en Galicia, 23 están en A Coruña, según la Asociación Nacional de Estaciones de Servicio Automáticas.
Rusia no descarta que el precio del barril de petróleo supere los 150 dólares este año
Nadie duda de que el precio de la gasolina y el diésel seguirá creciendo de cara al verano. Y el rali puede no acabar ahí porque, según el viceprimer ministro de Rusia, Alexander Novak, la cotización del barril de petróleo podría alcanzar este año los 150 dólares el barril si se mantienen las expectativas de demanda. «Hay varios pronósticos que sugieren particularmente un mayor aumento en el [precio] del petróleo. Todo depende del equilibrio entre la oferta y la demanda», dijo Novak en los márgenes del Foro Económico Internacional de San Petersburgo, según recoge Efe. No descarta, incluso, superar esa barrera. De acuerdo a sus estimaciones, la demanda de crudo, lejos de reducirse, aumentará un 5 % en los próximos años.
Fuente: lavozdegalicia.es